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lunes, 24 de julio de 2017

A 234 Años del Natalicio del Libertador. Una actitud ejemplar que debemos reinvindicar hoy. Eliu Cardozo


A 234 años del Natalicio del Libertador
Eliú Cardozo Sáez

Una actitud ejemplar que debemos reivindicar hoy.

Sobre el Libertador se han escrito numerosas obras completas y poemas muy hermosos, sin embargo, quise apoyarme en el libro que escribió otro ilustre venezolano del Siglo XX, el maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa, que se titula: El magisterio americano de Bolívar. 
 
Allí Prieto nos relata de la actitud ejemplar del Libertador, que debemos reivindicar hoy, ante los premios que le quiso dar otra hermana República, como Colombia, hija igualmente del Libertador. El relata que: “En 1821 renuncia ante el Congreso a sus sueldos y los premios que le otorga Colombia por sus servicios públicos.....formas eficaces de actuación de todo buen educador, que no busca beneficios personales, sino acercar el mayor bien a los pueblos (p.62)

Mas adelante refiere igualmente: “Bolívar no quiso nunca emplear los dineros del Estado para beneficiarse personalmente. Incluso rehusó emplear influencias en defensa de sus propios intereses (p. 64)

Aquí como podemos ver la diferencia de: interés personal e interés colectivo, subordinando dicha conducta al interés colectivo en primer lugar, lo que ya deja ver los principios y valores morales que guiaban a este gigante e ilustre latinoamericano.

Y estas muestras de conducta recta en favor del interés colectivo se hicieron presentes ante el Congreso del Perú, el cual quiso recompensarle con un millón de pesos y de igual manera rechazó la oferta con dignidad y no sin cierto disgusto (p.63).

En su extraordinario análisis el maestro Prieto Figueroa declara:
El magisterio de Bolívar frente a su hermana, se alarga a todo un pueblo, a la América entera, donde los más pretenden hacer la Ley a su medida, sobre todo los gobernantes de elástica justicia, cuando de defender sus prerrogativas se trata, pero de estrecha puerta, embudo de ignominioso paso, cuando se requiere abrir cauce a los derechos del pueblo, a las justas aspiraciones de los humildes y de los desposeídos.

Y finaliza con esta sentencia que deberíamos retomar como un rayo de luz, al expresar:
“Esos derechos no deben ser mayores, pero tampoco menores, que los del simple ciudadano a la hora de hacer justicia para todos” (Idem. p.65)

Dios permita a los 234 años del Natalicio de nuestro padre-libertador, Simón Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Ponte y Palacios Blanco, amado y recordado Libertador, que nuestros insignes gobernantes, dirigentes políticos (de todas las tendencias), hombres y mujeres, reflexionemos y llevemos a la práctica tu ejemplo de honradez, de desprendimiento y de amor a tu patria.










Bibliografía: Prieto F. Luis B. (2006). El magisterio americano de Bolívar. Fundación Biblioteca Ayacucho. Caracas-Venezuela.

jueves, 20 de julio de 2017

Estado, pueblo, ética, valores, principios y democracia en la República Bolivariana de Venezuela. ¿En transición o en fase terminal?. Eliu Cardozo


Estado, sociedad, ética, valores, principios y democracia en la República Bolivariana de Venezuela
¿En transición o en fase terminal?
Eliú J. Cardozo Sáez1
Los actos de desesperación pueden convertirse en tu mayor oprobio
1.- Introducción:
El presente artículo se elabora desde una perspectiva histórica, critico-dialéctica a partir de los fenómenos socio-políticos-económicos que han venido ocurriendo en Venezuela durante por lo menos los últimos diez años y que requiere del concurso del Estado y toda la sociedad, para poder avanzar a una instancia democrática que garantice la participación ciudadana, rendición de cuentas, transparencia, y fomente valores de solidaridad, respeto a la pluralidad y diversidad de opiniones e ideas a fin de fortalecer la permanencia del sistema democrático, con el apoyo de los partidos, grupos sociales, instituciones públicas y privadas, ciudadanos y ciudadanas.
Desde luego que para abordar conceptos y categorías tales como: Estado, democracia, pueblo, ética, valores, y principios contenidos en la actual Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, debemos acercar la investigación con la visión de hombres y mujeres que han contribuido a fortalecer este sistema, su visión y pensamiento.
Igualmente el investigador asume una postura crítica antes los conceptos y categorías aquí expresados, relacionándolo con las conductas asumidas por los actores que intervienen y que se evidencian en informes oficiales, documentos y las experiencias vividas, lo cual representa la visión acerca de los fenómenos que le ha tocado vivir en este tiempo espacial-temporal. 

2.- Estado:
El Estado es una voluntad soberana en el más amplio sentido de la palabra. Constituye un poder que puede movilizar todos los recursos de la nación y no acepta, interferencia de ninguna otra voluntad; es la voluntad única de la nación.
Expresa Cardoza (1996): Que el Estado en cualquiera de sus manifestaciones históricas, siempre ha necesitado una fuerza militar de apoyo. En los tiempos modernos esta necesidad ha crecido. La organización castrense se ha hecho más compleja y su papel institucional ha adquirido mayor importancia.(p.278)
El problema del actual Estado y sus estructuras, en primer lugar seria muy ligero afirmar que no cumple en su totalidad sus funciones, o como dicen algunos líderes políticos, que la responsabilidad “es de los militares” otro error. Dentro de esas estructuras (Civiles y militares) están los líderes, los gerentes, quienes la dirigen, hacia allá es que se debe revisar y evaluar.
Sin embargo en este orden de ideas, Cardoza (1996) refiere: “Así el ejército se convierte en el instrumento del Estado, por excelencia, para imponer la violencia institucionalizada y salvaguardar los intereses de la clase dominante. Pero también; puede convertirse en el árbitro supremo para cambiar los destinos del Estado y, descubrir su faceta política, contraria a su condición apolítica no beligerante. Conservación y cambio, subordinación e insubordinación están pues, en la esencia interventora de las fuerzas armadas en las instancias del poder político (p.276) 
 
3.- La ética, moral , valores y principios:
Este conjunto de conceptos no pueden estar separados en la practica y constituye un eje fundamental para poder ejercer de manera honesta, transparente y eficiente funciones publicas, permitir lo contrario es hacer un flaco servicio a la nación.
La ética discute y juzga las normas morales y jurídicas, siendo las primeras las que regulan lo que la sociedad aprueba o desaprueba, y las segundas la que regulan las prohibiciones, castigando el incumplimiento de las mismas.
En el articulo 1 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela se señalan cuales son esos valores que nos rigen como nación, y dice .....y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad, justicia y paz internacional, en la doctrina de Simón Bolívar, el libertador”. Mas adelante el Articulo 2 refuerza y dice que “Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su actuación, la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad social y, en general, la preeminencia de los derechos humanos, la ética y el pluralismo político”.
Todo un contexto bien especifico del cual se puede elaborar toda una doctrina sobre la actuación que deberían tener los funcionarios, funcionarias al servicio de la administración publica y toda la sociedad en general.
No hay lugar a dudas que quienes han venido violentando sistemáticamente este conjunto de principios que nos debe regir como país, en primer lugar han sido los que han dirigido el país, y en segundo orden una parte importante de la sociedad, cuando se les ha confiado importantes recursos para invertir en diferentes obras y servicios.
Por ello la revisión, rectificación y corrección debe hacerse en todos los ordenes de la vida nacional, en la cual estas desviaciones tengan incidencia en el normal desarrollo y desenvolvimiento de la vida publica y privada.
Sobre los principios que debe regir toda la administración publica, si vamos al Articulo 141, allí se estableció:
La administración Publica esta al servicio de los ciudadanos y ciudadanas y se fundamenta en los principios de honestidad, participación, celeridad, eficacia, eficiencia, transparencia, rendición de cuentas y responsabilidad en el ejercicio de la función publica, con sometimiento pleno a la ley y al derecho.
Mas claro y preciso no pudo ser el constituyente y quizás por eso fue catalogada esta constitución, en su momento, como la mejor del mundo, ya que si estos principios se aplicaban en su totalidad el Estado y la sociedad, pudieran haber funcionado en las mejores condiciones que las actuales.
Como profesor de Políticas Publicas, en la maestría de gerencia administrativa, nos toco exponer y hablar sobre este articulado antes mencionado, y la respuesta mayormente dada por parte de los alumnos era, “profesor eso que esta en la Constitución es muy bonito, pero en la practica no se cumple”.
He allí el dilema entre la ética, los valores y los principios por los cuales deberíamos regirnos. Nos preguntamos entonces, acaso ¿Es un problema constitucional para resolver los distintos problemas que requieren solución para el país, o simplemente una voluntad y disposición para aplicar las leyes, hacerlas cumplir y hacer los correctivos necesarios y tomar las decisiones mas convenientes a los intereses del pueblo?. Definitivamente que las ultimas tres están íntimamente relacionadas y requieren solamente: voluntad y decisión.
¿Que se ha observando en este espacio de temporal-tiempo?
Quienes han venido ejerciendo funciones en el gobierno, como dentro de la sociedad, persisten las conductas de los antivalores, no me refiero a toda la administración publica en general, porque seria injusto reconocer que hay gente muy honorable y respetable en esas instancias, pero sí hay un importante grupo de personas, con profesiones, especialidades y oficios muy variados, que le han venido haciendo daño, cumpliendo diversas funciones públicas o al servicio de las comunidades.
Y esto igualmente se puede corroborar en los informes de gestión que presentó el ciudadano Contralor General de la República y los informes de gestión del Ministerio Publico, cuando se destinaron importantes recursos para cumplir determinadas obras o servicios, para cubrir necesidades de alimentos, medicinas, en beneficio de la población, y en algunos casos esos recursos económicos fueron desviados, y no para lo cual fueron presupuestados2. Igualmente paso en los Concejos Comunales y en las Cooperativas.
Los casos son numerosos y muy variados, pudiendo ser vistos y estudiados en la propia página oficial de las instituciones antes mencionadas.
La ética es la parte que se ocupa del obrar del hombre, de sus acciones. Este obrar del hombre se puede entender en forma individual o en forma social.
De allí que se venga insistiendo en que más allá de querer imponer ideologías, que una persona sea de izquierda, derecha o de centro, esto no puede ser excusa para que determinados grupos o personan en particular cometan violaciones de todo tipo a cuenta de pertenecer a un sector y no hayan instituciones que paren estos desafueros.
Por esta razón surge ensayo publicado, y propuesta de ir “hacia una teoría metapolítica del Control Social3, para que sea la sociedad la que controle al Estado, en ese conjunto y tipos de desviaciones. Mas adelante estudiaremos otras motivaciones que tienen que ver con la independencia y separación de los poderes, que son vitales para fortalecer un sistema democrático.
Tomas Hobbes (1588-1679) expreso que la naturaleza humana está bien plagada de ambición y codicia. En su obra el Leviatán (1651) reconoce en la naturaleza humana la propensión a destruir al otro si es necesario con tal de obtener fama, riqueza o gloria (p. 377)
Es precisamente lo que se ha venido observando, quienes han estado militando en partidos políticos o participando en alguna organización social, es lo que vive y padece día a día, y aquí no nos referimos únicamente a los partidos, existen también organizaciones sociales, por mencionar un ejemplo, como las universidades y los colegios de profesionales universitarios donde la tendencia ha sido hacia la permanencia casi exclusiva de pocas personas en esos cargos y pudiera hasta decirse casi que vitalicia.
Es decir, ¿que se puede esperar de hombres llenos de ambición y codicia, que a nombre de una determinada ideología sean capaces de cometer los peores crímenes?
Ahora si nos vamos al informe de Gestión que presentó el ciudadano Contralor General de la República, allí el señaló lo siguiente: “Nos preocupa que todavía los informes de la contraloría continúen siendo la escabrosa repetición de fallas y deficiencias recurrentes en la administración pública, que cargamos como una pesada herencia”.... y luego más adelante afirma: “aun es materia pendiente la modernización del Estado Venezolano y su transformación en el instrumento redentor que nuestros compatriotas reclaman y merecen” (p. 2)
Como podemos observar la preocupación del Contralor, es una preocupación de importantes sectores sociales, académicos y de la comunidad en general, que se manifestó de distintas maneras y formas para atacar este problema, el cual en muchos casos simplemente fue ignorado. Sobre el empeño de querer imponer una asamblea nacional constituyente, desconociendo la soberanía popular (Art. 347), basta ver el pronunciamiento que hizo conjuntamente las Academias de ciencias, para entender esa preocupación de una pluralidad de hombres y mujeres de ciencias en todas sus especialidades y ramas4. Y como se ha dicho en reiteradas oportunidades, el problema no es cambiar la Constitución, el asunto es cumplirla y que haya separación e independencia de poderes. De allí se desprende el significado de la moral. Ser moral es equivalente a ser más humano, apropiarse de las cualidades.

4. La democracia:
Sobre este concepto existe una gran variedad de definiciones que pudieran interpretarse, de distintas maneras, pero en todo caso lo importante es relacionar los elementos allí existentes y en nuestro caso particular nos identificamos con Morin (2001) cuando dice:
La democracia supone y alimenta la diversidad de los intereses, así como la diversidad de ideas. El respeto de la diversidad significa que la democracia no se puede identificar con la dictadura de la mayoría sobre las minorías, ella debe incluir el derecho de las minorías y contestatarios a la existencia y a la expresión, y debe permitir la expresión de las ideas heréticas y marginales (p. 108)5
¿Que significa esto según nuestra visión? Que no se puede ni debe invisibilizar las posturas, por muy desagradables o altisonantes que parezcan, mucho menos iniciar procesos de persecución política y negar derechos humanos fundamentales por pensar distinto. Eso es lo que llamo arbitrariedades, aberración y espíritus débiles de quienes actúan de ese modo. Y lo otro es que no se puede pretender erigirse como dueño de la verdad absoluta, ya que eso significa ser dogmático en su accionar.
Por eso igualmente nos identificamos con Morin cuando afirma: “La democracia necesita tanto conflicto de ideas como de opiniones que le den vitalidad y productividad” (Idem, p.108) Se trata pues, de ser creativos y productivos en medio de los conflictos y las incertidumbres.
Es un hecho notorio y significativo que la desigualdad social ha conducido a las sociedades a sobrevivir por medio de una marcada competencia en la que desafía leyes y virtudes. El egoísmo es un grave pecado del hombre que conduce a la desintegración de la humanidad (Rangel, 2004:58)
Esa competencia de no importarle leyes y virtudes, uno lo ve en las calles, en los barrios, los pueblos, donde existe un desespero y sobrevivencia producto de la escaces, aunado a los antivalores, la cual se ve auspiciada, cuando el gobierno lejos de poner orden, atiza el desorden administrativo y por supuesto no hay quien ponga con ética y moral el cumplimiento de las leyes que han sido creadas para eso, y poder vivir en armonía, respetando los derechos a los demás. 

5. Pueblo:
La categoría pueblo es una categoría política. En este caso me referiré al pueblo, en el cual todos formamos parte, con sus creencias, diversidad cultural, posiciones sociales, económicas, ideológicas y religiosas. A ese pueblo el Maestro del Libertador Don Simón Rodríguez, dijo: “Solo un pueblo soberano puede asumir sus intereses, organizarse y luchar para cristalizarlos, para convertirlos en realidad (2003: p.38). Este es un reto y tema permanente como nación y país soberano que todos debemos asumir. La clave es la organización, disciplina y su dinámica en sus diferentes campos de actuación, no hay otra.
Ahora sobre termino pueblo Badiou (2014) hace algunas precisiones sobre su conformación en el sentido de que la clase media es el pueblo de las oligarquías capitalistas, y hace hincapié que “es un falso pueblo compuesto por aquellos que establecen un consenso en torno a la oligarquía” (p.16) Y esto proviene de la ideología dominante de nuestras sociedades que es Aristotélica.
Sobre los procesos de cambio y de transformación, de revoluciones auténticas y verdaderas, representan necesariamente un proceso de construcción que hacen los pueblos y no los partidos y mucho menos el Estado (Contréras 2009:84)
Por ello la madurez, el conocimiento y la determinación que tenga el pueblo será en definitiva lo que hará la diferencia y producirá los cambios necesarios.

6- Conclusiones:
¿Si no existe un adecuado control político, fiscal y social, como se puede garantizar que hayan inversiones o planes de desarrollo económico y social que sean exitosos?
Una persona, ciudadano y ciudadana que se considere hombre o mujer de Estado, sea porque cumple o haya cumplido servicios a la República, en el gobierno, como docente, director-gerente, trabajador o investigador, no puede (y eso es una voluntad individual) permanecer indiferente a todo este tipo de desviaciones y desvaríos. Si lo hace desconoce los principios y valores que nos rigen como nación, entre los cuales están: La vida, la libertad, la democracia, entre otros. No existe sociedad que se pueda mantener con antivalores de forma permanente, no es viable en el tiempo. La sociedad, el pueblo no puede seguir permitiendo que bajo ofertas engañosas, lideres políticos y/o sociales, pretendan imponer otro tipo de agenda que no este contemplada en la carta magna. Eso además de ser una desviación, constituye una falta grave hacia sus propios seguidores y conciudadanos que confiaron en su oferta inicial.
Se puede tener una determinada ideología, posición filosófica, religiosa, y ese no es el problema, no se puede admitir que se antepongan sin razones, sin fundamentos o motivaciones basadas en lo ideológico y excusas, para cometer todo tipo de arbitrariedades, atropellos y desviaciones en perjuicio del cuerpo social y de la propia Constitución.
Aquí es, donde la sociedad toda debe activarse y unir esfuerzos para extirpar definitivamente este tipo de conductas. Lo que Foucault en su celebre obra. “El discurso del Poder”, definió como esas diversas disciplinas y saberes deben desencerrarse y ponerlas al servicio de la sociedad y no del poder-saber. Esto constituye en si un tema pendiente que requerirá un gran esfuerzo y estudio de todos para adquirir eso que denomino un nivel de consciencia colectiva y superior.
Sobre el ejercicio del poder y la política, se sabe que existen varios (militar, económico, social e internacional) que definitivamente influirán o determinarán el curso definitivo de los acontecimientos, más allá de principios, valores y todo lo que contenga la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que sigue siendo el rumbo a seguir.
Todo político serio y responsable con sus seguidores, debe ser capaz de retroceder, de negociar cuando tenga la necesidad de eso. Y existen circunstancias tan excepcionales donde hay que acelerar los tiempos en la toma de decisiones.
La actuación que pueda tener el conjunto de la Fuerza Armada Nacional (incluyendo soldados y oficiales en sus diferentes grados y Jerarquías activos) ante situaciones de vulnerabilidad y violación sistemática de derechos humanos, sociales, económicos y políticos, es clave y eso esta bien definido y analizado en el artículo 328. 6
Lo que ayudaría a fortalecer el sistema democrático y por ende cualquier sistema o modelo de desarrollo que se ponga en practica para que sea eficiente, será la conducta de ese hombre o mujer de Estado, que le permita ver por encima de mezquinos y subalternos intereses y apoye mas en sus valores y convicciones morales para no sucumbir a la hora de la prueba.
¿Y cual es la hora de la prueba? Cuando se está en funciones públicas o privadas, y se cede a la tentación del dinero fácil, de los placeres y de todo tipo de desviaciones, aberraciones e inmoralidad, incluyendo no tener carácter e independencia de criterios a la hora de fijar posición ante esas mismas desviaciones.
La necesidad imperiosa de que los órganos del Poder Público Nacional: Asamblea Nacional, Tribunal Supremo de Justicia, Poder electoral y Poder moral, actúen separada e independientes y sin ningún otra intervención que sean sus consciencias (diputados, magistrados o rectores), es lo que garantizaría ese cumplimiento de normas, procedimientos que ya han sido previamente elaborados y establecidos.
Hay que profundizar el control fiscal, social y político, para que sea la sociedad la que controle y active ante las desviaciones que se cometan a todo nivel de las estructuras del Estado. Y luego que las estructuras creadas para ese fin cumplan, canalicen e investiguen dichas denuncias.
De igual manera, el control político, donde Asamblea Nacional ejerza sus funciones en todas las instituciones que deben rendir su informe de gestión anual y ser objeto de revisión de sus cuentas, tal como están contenidas en la C.R.B.V.
Se necesitan hombres y mujeres que lideren, asuman posiciones de dirección y sean coherentes en el pensar, el discurso y la acción, esto depende fundamentalmente de valores y principios.
Para llevar este conjunto de acciones y principios lo fundamental es tener VOLUNTAD y el carácter para hacer las cosas, tal como lo señalan las leyes y principios contenidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, de lo contrario si ese o esa candidata al optar a un determinado cargo o puesto dentro del Estado, es débil de carácter y en sus convicciones ética y morales, sencillamente no es confiable, tenga el nivel y la preparación académica idónea.

Referencia Bibliográficas
Badiou, Alain et al. (2014) ¿Que es un pueblo?. LOM Ediciones. Argentina.
Cardoza, Ebert. (1996) Estado y militarismo en Venezuela. Revista Actual N° 32. Universidad de Los Andes. Mérida-Venezuela.
Contréras, Enrique. (2009). Globalización, Relaciones de Poder y Doctrina Militar. Editorial Ruptura. Caracas-Venezuela.
Morin, Edgar. (2001) Los 7 saberes para la educación del futuro. Editorial Nueva Visión. Tucuman-Argentina.
Rangel, J Gregorio. (2004). El infierno del mundo cristiano. Talleres Gráficos Universitarios. Mérida-Venezuela


Notas:
1Licenciado en Contaduría Pública, Magíster en Gerencia Administrativa, Investigador PEII (A1), Doctorando en Estudios Políticos Universidad de Los Andes-Mérida, Venezuela.
2Ver Resumen de los Informes de Gestión por el Período comprendido del 2001-2010: http://teoriametapolitica.blogspot.com/2017/01/cuadro-historico-de-la-admnistracion.html
5Morin Edgar (2001). Los 7 saberes para la educación del futuro. Ediciones Nueva Visión . Tucuman- Argentina.
6Análisis del Artículo 328 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: http://eliucardozo.blogspot.com/2017/04/la-fuerza-armada-y-el-articulo-328-de.html

miércoles, 19 de julio de 2017

"Tengo un sueño". Martin Luther King, Jr.

Martin Luther King, Jr.
"Tengo un sueño"
DISCURSO EN WASHINGTON, D.C.

Pronunciado: El 28 de agosto de 1963 delante del monumento a Abraham Lincoln en Washington, DC, durante una histórica manifestación de más de 200,000 en pro de los derechos civiles para los negros en los EE.UU.
Versión al castellano: No consta.
Versión digital: Wikisource en Español, 2006.

Esta edición: Marxists Internet Archive, septiembre de  2006.

Estoy orgulloso de reunirme con ustedes hoy, en la que será ante la historia la mayor manifestación por la libertad en la historia de nuestro país.
Hace cien años, un gran estadounidense, cuya simbólica sombra nos cobija hoy, firmó la Proclama de la emancipación. Este trascendental decreto significó como un gran rayo de luz y de esperanza para millones de esclavos negros, chamuscados en las llamas de una marchita injusticia. Llegó como un precioso amanecer al final de una larga noche de cautiverio. Pero, cien años después, el negro aún no es libre; cien años después, la vida del negro es aún tristemente lacerada por las esposas de la segregación y las cadenas de la discriminación; cien años después, el negro vive en una isla solitaria en medio de un inmenso océano de prosperidad material; cien años después, el negro todavía languidece en las esquinas de la sociedad estadounidense y se encuentra desterrado en su propia tierra.

Por eso, hoy hemos venido aquí a dramatizar una condición vergonzosa. En cierto sentido, hemos venido a la capital de nuestro país, a cobrar un cheque. Cuando los arquitectos de nuestra república escribieron las magníficas palabras de la Constitución y de la Declaración de Independencia, firmaron un pagaré del que todo estadounidense habría de ser heredero. Este documento era la promesa de que a todos los hombres, les serían garantizados los inalienables derechos a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.

Es obvio hoy en día, que Estados Unidos ha incumplido ese pagaré en lo que concierne a sus ciudadanos negros. En lugar de honrar esta sagrada obligación, Estados Unidos ha dado a los negros un cheque sin fondos; un cheque que ha sido devuelto con el sello de "fondos insuficientes". Pero nos rehusamos a creer que el Banco de la Justicia haya quebrado. Rehusamos creer que no haya suficientes fondos en las grandes bóvedas de la oportunidad de este país. Por eso hemos venido a cobrar este cheque; el cheque que nos colmará de las riquezas de la libertad y de la seguridad de justicia.

También hemos venido a este lugar sagrado, para recordar a Estados Unidos de América la urgencia impetuosa del ahora. Este no es el momento de tener el lujo de enfriarse o de tomar tranquilizantes de gradualismo. Ahora es el momento de hacer realidad las promesas de democracia. Ahora es el momento de salir del oscuro y desolado valle de la segregación hacia el camino soleado de la justicia racial. Ahora es el momento de hacer de la justicia una realidad para todos los hijos de Dios. Ahora es el momento de sacar a nuestro país de las arenas movedizas de la injusticia racial hacia la roca sólida de la hermandad.

Sería fatal para la nación pasar por alto la urgencia del momento y no darle la importancia a la decisión de los negros. Este verano, ardiente por el legítimo descontento de los negros, no pasará hasta que no haya un otoño vigorizante de libertad e igualdad.

1963 no es un fin, sino el principio. Y quienes tenían la esperanza de que los negros necesitaban desahogarse y ya se sentirá contentos, tendrán un rudo despertar si el país retorna a lo mismo de siempre. No habrá ni descanso ni tranquilidad en Estados Unidos hasta que a los negros se les garanticen sus derechos de ciudadanía. Los remolinos de la rebelión continuarán sacudiendo los cimientos de nuestra nación hasta que surja el esplendoroso día de la justicia. Pero hay algo que debo decir a mi gente que aguarda en el cálido umbral que conduce al palacio de la justicia. Debemos evitar cometer actos injustos en el proceso de obtener el lugar que por derecho nos corresponde. No busquemos satisfacer nuestra sed de libertad bebiendo de la copa de la amargura y el odio. 

Debemos conducir para siempre nuestra lucha por el camino elevado de la dignidad y la disciplina. No debemos permitir que nuestra protesta creativa degenere en violencia física. Una y otra vez debemos elevarnos a las majestuosas alturas donde se encuentre la fuerza física con la fuerza del alma. La maravillosa nueva militancia que ha envuelto a la comunidad negra, no debe conducirnos a la desconfianza de toda la gente blanca, porque muchos de nuestros hermanos blancos, como lo evidencia su presencia aquí hoy, han llegado a comprender que su destino está unido al nuestro y su libertad está inextricablemente ligada a la nuestra. No podemos caminar solos. Y al hablar, debemos hacer la promesa de marchar siempre hacia adelante. No podemos volver atrás.

Hay quienes preguntan a los partidarios de los derechos civiles, "¿Cuándo quedarán satisfechos?"

Nunca podremos quedar satisfechos mientras nuestros cuerpos, fatigados de tanto viajar, no puedan alojarse en los moteles de las carreteras y en los hoteles de las ciudades. No podremos quedar satisfechos, mientras los negros sólo podamos trasladarnos de un gueto pequeño a un gueto más grande. Nunca podremos quedar satisfechos, mientras un negro de Misisipí no pueda votar y un negro de Nueva York considere que no hay por qué votar. No, no; no estamos satisfechos y no quedaremos satisfechos hasta que "la justicia ruede como el agua y la rectitud como una poderosa corriente".

Sé que algunos de ustedes han venido hasta aquí debido a grandes pruebas y tribulaciones. Algunos han llegado recién salidos de angostas celdas. Algunos de ustedes han llegado de sitios donde en su búsqueda de la libertad, han sido golpeados por las tormentas de la persecución y derribados por los vientos de la brutalidad policíaca. Ustedes son los veteranos del sufrimiento creativo. 

Continúen trabajando con la convicción de que el sufrimiento que no es merecido, es emancipador.

Regresen a Misisipí, regresen a Alabama, regresen a Georgia, regresen a Louisiana, regresen a los barrios bajos y a los guetos de nuestras ciudades del Norte, sabiendo que de alguna manera esta situación puede y será cambiada. No nos revolquemos en el valle de la desesperanza.

Hoy les digo a ustedes, amigos míos, que a pesar de las dificultades del momento, yo aún tengo un sueño. Es un sueño profundamente arraigado en el sueño "americano".

Sueño que un día esta nación se levantará y vivirá el verdadero significado de su credo: "Afirmamos que estas verdades son evidentes: que todos los hombres son creados iguales".

Sueño que un día, en las rojas colinas de Georgia, los hijos de los antiguos esclavos y los hijos de los antiguos dueños de esclavos, se puedan sentar juntos a la mesa de la hermandad.

Sueño que un día, incluso el estado de Misisipí, un estado que se sofoca con el calor de la injusticia y de la opresión, se convertirá en un oasis de libertad y justicia.

Sueño que mis cuatro hijos vivirán un día en un país en el cual no serán juzgados por el color de su piel, sino por los rasgos de su personalidad.
¡Hoy tengo un sueño!

Sueño que un día, el estado de Alabama cuyo gobernador escupe frases de interposición entre las razas y anulación de los negros, se convierta en un sitio donde los niños y niñas negras, puedan unir sus manos con las de los niños y niñas blancas y caminar unidos, como hermanos y hermanas.

¡Hoy tengo un sueño!

Sueño que algún día los valles serán cumbres, y las colinas y montañas serán llanos, los sitios más escarpados serán nivelados y los torcidos serán enderezados, y la gloria de Dios será revelada, y se unirá todo el género humano.

Esta es nuestra esperanza. Esta es la fe con la cual regreso al Sur. Con esta fe podremos esculpir de la montaña de la desesperanza una piedra de esperanza. Con esta fe podremos trasformar el sonido discordante de nuestra nación, en una hermosa sinfonía de fraternidad. Con esta fe podremos trabajar juntos, rezar juntos, luchar juntos, ir a la cárcel juntos, defender la libertad juntos, sabiendo que algún día seremos libres.

Ese será el día cuando todos los hijos de Dios podrán cantar el himno con un nuevo significado, "Mi país es tuyo. Dulce tierra de libertad, a tí te canto. Tierra de libertad donde mis antesecores murieron, tierra orgullo de los peregrinos, de cada costado de la montaña, que repique la libertad". Y si Estados Unidos ha de ser grande, esto tendrá que hacerse realidad.

Por eso, ¡que repique la libertad desde la cúspide de los montes prodigiosos de Nueva Hampshire! ¡Que repique la libertad desde las poderosas montañas de Nueva York! ¡Que repique la libertad desde las alturas de las Alleghenies de Pensilvania! ¡Que repique la libertad desde las Rocosas cubiertas de nieve en Colorado! ¡Que repique la libertad desde las sinuosas pendientes de California! Pero no sólo eso: ! ¡Que repique la libertad desde la Montaña de Piedra de Georgia! ¡Que repique la libertad desde la Montaña Lookout de Tennesse! ¡Que repique la libertad desde cada pequeña colina y montaña de Misisipí! 
"De cada costado de la montaña, que repique la libertad".

Cuando repique la libertad y la dejemos repicar en cada aldea y en cada caserío, en cada estado y en cada ciudad, podremos acelerar la llegada del día cuando todos los hijos de Dios, negros y blancos, judíos y cristianos, protestantes y católicos, puedan unir sus manos y cantar las palabras del viejo espiritual negro: "¡Libres al fin! ¡Libres al fin!
Gracias a Dios omnipotente, ¡somos libres al fin!"

lunes, 10 de julio de 2017

Hacia una Teoria Metapolitica del Control Social. Eliu Cardozo


En medio de una tremenda adversidad teórica, académica y política, aquí les dejo la portada del libro, Hacia una teoría metapolítica del control social, que pronto sera publicada, producto de una investigación que debe culminar, Dios mediante, en una tesis doctoral. Sin embargo, he considerado oportuno compartir algunas de las reflexiones que están contenidas en este ensayo, que apenas es el comienzo de una linea de investigación que deber ser puesta a disposición de quienes estén interesados en el tema, para el debate y discusión de las ideas, para que luego sean acogidas por la sociedad.
En esta obra se hace un diagnostico y se reflexiona sobre.
- El comportamiento general y sistemático de la Administración Publica en general, según los informes de la Contraloría General de la República.

- Un área de conocimiento para el nuevo Estado y la sociedad en transformación.

- La brecha entre norma y realidad. Un desarrollo legal truncado al no reglamentarse las disposiciones en el sentido que la Ley dispone.

- Crisis que se convierte en decadencia, por aquellos conceptos, sistemas y procedimientos que han resultado ser insuficientes producto de un comportamiento y conducta poco ética en su accionar.

- La ineficacia e ineficiencia como males transversales de la administración publica.

- Como se visualiza el control social con el aspecto de la desviación de recursos que constituye en la mayoria de los casos delitos de patrimonio publico.

- Las propuestas para ir hacia una Teoría Metapolítica del Control Social, donde sea la sociedad la que controle al Estado, sus instituciones, y no al revés.